viernes, 7 de septiembre de 2007

Mentiras y el IPC

Parafraseando a Benjamin Disraelí, logramos verificar que no descubrimos nada nuevo. En lugar de las “estadísticas” en forma genérica, la mayor de las mentiras hoy día en nuestro país, es, dentro de ellas, el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El 2007 comenzó con un acto de prepotencia que ha tenido consecuencias mucho más graves que las que se previeron en aquel momento. La intervención por parte del Secretario de Interior Moreno al INDEC a los efectos de evitar un desborde del IPC en pleno año electoral, ha determinado la distorsión de un índice clave a los efectos de la vida económica ordenada de una sociedad.

Pero esta no fue la única consecuencia. El CER, coeficiente por el cual se calcula la actualización de capital de un tercio de deuda pública renegociada (luego de la quita) también se ha visto impactado, disminuyendo la renta de quienes creyeron que luego del default, la Argentina se encaminaba hacia la seriedad.

Por último, pero no por eso de menor importancia, se ha impactado de lleno en la credibilidad del INDEC, un ente que durante décadas había logrado mantenerse al margen de la falta de seriedad de las sucesivas administraciones, obteniéndose como resultado la duda sobre todos los índices e indicadores que el Instituto publica.


El IPC

Este índice es la medida de la inflación. Para su confección se relevan de manera periódica una importante cantidad de productos y servicios, obteniendo los datos de los comercializadores y prestadores de los mismos. Es evidente que para que este relevamiento tenga sentido, la confidencialidad de los informadores de los precios debe ser preservada a rajatabla. De no hacerlo, la posibilidad de verse presionados por el poder de turno para que los precios se mantengan constantes, haría que en lugar de comunicar los precios reales, informen los que desde el Poder Ejecutivo quieran escuchar, inutilizando así la encuesta y sus resultados.

Una de las graves acusaciones hacia el Secretario de Comercio Interior es que presionó a las autoridades del Indec para que le suministren la lista de empresas y comercios que declaraban aumentos. Los propios técnicos que fueron removidos por resistirse a violar el secreto estadístico, denunciaron estas presiones.En realidad, la necesidad de confidencialidad se verifica no sólo en la confección del IPC sino en cualquier encuesta de precios o de calidad de servicio que se realice.

El otro factor necesario para asegurar la calidad del índice, es la idoneidad técnica de los analistas y de los responsables del INDEC. La atropellada de Moreno logró poner en duda ambos pilares, socavando así de manera profunda y calculada la veracidad de los índices.


Las encuestas privadas y otras referencias.

La falta de credibilidad en los números oficiales, ha generado la necesidad de elaborar índices en consultoras y ONGs, que resultan mucho más creíbles.

Si bien la diferencia en la magnitud de las respectivas encuestas es significativa, el punto de convergencia al que llegan hoy, tanto consultoras, como centros de estudios y otras ONGs, demuestra claramente que más allá de sus respectivas simpatías políticas, el IPC no refleja el alza real de la inflación.

Aun así, estos índices privados contienen las distorsiones que el programa implementado desde la Casa Rosada incluye. Esto es, no sólo las tarifas congeladas desde hace ya más de un lustro, sino la política de precios impuestos (¿alguien puede creer que son acordados?) sobre los bienes más sensibles de las canasta familiar.

Como ejemplo veamos que pasó en Agosto de 2007. Mientras el Indec asegura que el rubro Alimentos y Bebidas el aumento fue del 1.2%, la Liga de Acción del Consumidor ADELCO, contabiliza un 7%. Para el gobierno la canasta básica alimentaria aumentó 2.2% pero para la consultora Equis, el incremento para el mismo mes fue de 7.15%

Mientras la inflación acumulada en el año según los datos oficiales es del 5% (0.6% en Agosto), la Asociación de Consumidores Libres calculó 16%.

Otra forma de aproximarse al cálculo de la inflación es a través del incremento en la recaudación del IVA. Durante los primeros ocho meses de 2007 los ingresos por este tributo aumentaron un 35%. Considerando un crecimiento real del consumo del 8,5% y una mejora en la eficiencia recaudatoria del 3% el efecto de aumento de precios sería del 20,8%.

La diferencia entre la estimación de la inflación para el 2007 basada en los números del Indec (8% / 8.3%) y los privados (22% / 25%) o la recaudación del IVA, demuestra a las claras que la manipulación de los índices no es ni menor ni sutil.

Lo que hace inútil al esfuerzo de los interventores del Indec, es justamente esa falta de sutileza, que ha logrado que ya nadie tome el índice oficial en serio, por lo que el desgaste en la credibilidad de los dichos del gobierno, son sólo costo sin beneficio alguno.

Una consecuencia de la inexistencia de un indicador confiable, es la dificultad en el cálculo económico de los negocios. Agregado esto al incremento de la tasa de interés, se produce un fuerte desaliento a la inversión y a la creación de empleo.. La tasa interbancaria para entidades de 1ra línea, ya ha llegado al 13%.


El Iceberg

Hasta aquí estamos describiendo la parte visible del iceberg. Pero los que viajaban en el Titanic aprendieron a un altísimo costo, que lo más peligroso está fuera de la vista. El peligro está bajo la superficie. Hoy en la Argentina, pasa lo mismo cuando hablamos de la inflación.

Cuando el mercado es intervenido y las decisiones de los burócratas reemplazan las preferencias de los individuos, entonces las mediciones de precios, aún sin manipulaciones, dejan de ser representativas.

Vimos que aun los índices no oficiales, están contaminados por la intervención del estado en la fijación de precios y tarifas. Mientras las tarifas se mantengan congeladas y los precios relevados sean los que desde la Secretaria interior se fijen, todo seguirá igual.

Pero más temprano que tarde, tomaremos conciencia que lo que está sumergido es más que relevante. Con precios congelados terminaremos en el desabastecimiento y aquellos que puedan pagar deberán concurrir al mercado negro. Pensar que los productores subsidiaran a la demanda, es cuanto menos infantil.

Las retenciones a las exportaciones deberán mantenerse para sostener la deteriorada solvencia fiscal y para evitar la desaparición completa en el mercado interno de aquellos commodities y bienes exportables que se consumen localmente (granos, derivados del petróleo, carne, leche, etc.). Obviamente esto limitará el ingreso de divisas y se perderán mercados que costó décadas obtener.

Con tarifas congeladas se agravará lo que en 2007 ya comenzamos a vivir. Las inversiones serán anunciadas y además deberán ser solventadas por el gobierno, ya que sin rentabilidad posiblemente nadie las realice. El sector privado ya comenzó a retirarse de la inversión y la consecuencia es la falta de gas, energía eléctrica, gasoil, etc.

La producción deberá desacelerarse para adecuarse a la oferta energética. El spread entre el precio internacional y el definido por el gobierno aumentará o al menos se mantendrá, siendo los subsidios que se deberán distribuir (de manera sospechosamente no transparente) causa de un aumento del gasto.

Como y cuando van a sincerarse los precios es algo difícil de predecir. Quien será el próximo presidente, cual es su visión de la realidad actual, cual será el apoyo legislativo con el que cuente, etc. Aunque no necesariamente quien vaya a contar con más apoyo esté dispuesto a realizar el ajuste.

Lo que si está claro es que el ajuste deberá ser realizado. Podrá ser programado y por ende ordenado, o bien por demorarse, será inevitablemente reactivo al choque con el iceberg. En este caso, sólo se podrán apagar incendios, que no serán pequeños ni pocos. Aunque nadie podrá argumentar que el choque no se podía predecir.


Buenos Aires, Septiembre 06, 2007.-

Publicado en Fundación FUTURO ARGENTINO (www.futuroargentino.com.ar), el DIARIO DE RIO NEGRO (http://www.rionegro.com.ar/diario/2007/09/15/20079o15f02.php) y Fundación ATLAS 1853 (http://www.atlas.org.ar/)

1 comentario:

susrey dijo...

Hola Gus: muy buenos todos los artículos que me envias y el blog excelente. Un cariño. sus